Minería metálica ha contribuido a devastación ambiental, aseguran investigadores
La gestión de la minería metálica en México deja mucho que desear; pues la Ley Minera actual ha permitido a estas empresas operar por medio del despojo y la devastación ambiental, así informan investigadores de CartoCrítica
Manifestación de Impacto Ambiental (MIA)
La organización multidisciplinaria CartoCrítica promueve el acceso público a la información socioambiental georreferenciada. Está conformada por investigadoras e investigadores. Para ellos, la evaluación de impacto ambiental o conocida como MIA, identifica las afectaciones de un proyecto en el entorno y establece medidas para prevenirlos. Por ello, es crucial para controlar el impacto de la minería en los ecosistemas y la salud pública.
Sin embargo, en México 4 de cada 10 minas metálicas no tienen una MIA autorizada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). De ahí que de acuerdo con la asociación, urge modificar la ley para que las mineras rindan cuentas y cumplan con las normas ambientales.
Manejo de residuos
Las mineras almacenan pilas de residuos que contienen metales y químicos tóxicos que pueden filtrarse al suelo y el agua; además, amenazan el ambiente y la salud. Estos depósitos son abandonados al aire libre y las mineras no les dan ningún tratamiento. Es alarmante que al menos 58 minas metálicas ni siquiera tienen información sobre cómo manejan sus residuos.
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Agua y minería metálica
Las concesiones de agua son permisos otorgados por la Comisión Nacional de Agua (Conagua) para el uso y aprovechamiento de este líquido vital; aseguran un manejo sostenible y evitan la sobreexplotación de los acuíferos. No obstante, el 62% de las minas metálicas en México no cuentan con una concesión de agua. Además, el 51% de éstas operan en acuíferos sin disponibilidad de agua o sobreexplotados.
“A esto hay que agregar que las mineras se sirven el agua con la cuchara grande. Todo el agua que se encuentran en su mina es suya”, informa a través de sus redes sociales CartoCrítica. Las denominadas “aguas de laboreo” por la Ley Minera no tienen concesión, balance hídrico y no consideran las sequías. “Aparece la mina, desaparece el agua”, añaden.
Respecto a los permisos de descarga de aguas residuales provenientes de las minas metálicas, 72% en México no cuenta con un permiso de descarga de aguas residuales. Éstas contienen químicos tóxicos y metales pesados; los cuales afectan al medio ambiente y la salud humana.
En ese sentido, los permisos de descarga otorgados por Conagua regulan el manejo y tratamiento de estos afluentes. Pero si no se llevan a cabo de manera oportuna, esto aumenta el riesgo de contaminación de los cuerpos de agua o suelos receptores. Y esto pone en riesgo la salud humana, la vida acuática y la calidad del agua para consumo y riego.
Emisiones contaminantes
El 55% de las minas metálicas operan sin reportar sus contaminantes, ni el manejo o disposición final en 17 años. A pesar de que las leyes obligan a las industrias a realizar el Registro de Emisiones y Transferencia de Contaminantes (RETC), el cual compila la información proporcionada anualmente de forma obligatoria por las industrias.
Las emisiones de la minería metálica contaminan el aire, causan problemas respiratorios y contribuyen al cambio climático y la lluvia ácida. Así afectan la calidad de cuerpos de agua y suelos. Por otro lado, también contaminan de forma directa el suelo. Lo cual disminuye la fertilidad de éste; tiene efectos negativos en la biodiversidad; y puede causar la acumulación de metales pesados en la cadena alimentaria.
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