Cultivan erizos de mar para combatir el cambio climático
La start up Noruega Urchinomics está contribuyendo para ayudar a proteger y restaurar los bosques de algas marinas. Para ello, ha creado un rancho de erizos, principales devoradores de bosques enteros de estas plantas
A los erizos de mar les gusta alimentarse de algas y sin supervisión pueden devorar bosques enteros de algas creando desiertos submarinos. De acuerdo con un clip publicado por Foro Económico Mundial, los bosques de algas son un sumidero vital de carbono en el océano. Estos se absorben y capturan más CO2 que los bosques tropicales. Pero los bosques de algas se están agotando cuatro veces más rápido que los bosques terrestres.
Brain Tsuyoshi Takeda, fundador y CEO de Urchinomics, dice que las causas se deben a tres factores:
“La sobrepesca o especies depredadoras y el cambio climático. Y básicamente lo que hemos hecho es permitir que los erizos exploten en población, se reproduzcan sin obstáculos. Esencialmente pastan los bosques de algas y los convierten en desiertos”.
Un negocio circular
La start up Noruega Urchinomics recolecta los erizos que causan el sobrepastoreo. Los engorda utilizando un alimento de origen sostenible y luego los vende a restaurantes alrededor del mundo por ser considerados un manjar.
Cuando no son devoradas por erizos de mar, las algas pueden crecer 45 cm por día y así recuperarse de la desertificación en solo cuatro meses.
Urchinomics ha construido un rancho de erizos de mar en Japón y se está expandiendo globalmente para acelerar su impacto.
“Los erizos del rancho han alcanzado precios de mercado equivalentes o superiores a los de las gónadas del erizo de mar salvaje capturado en Japón. Esto que da cuenta de la calidad del producto que podemos producir”, afirma Brain Tsuyoshi.
La empresa asegura que además de los beneficios climáticos, con su actuar, mejorará la biodiversidad y creará puestos de trabajo a la vez de permitir que los bosques de algas y sus poblaciones de peces tengan espacio para recuperarse.
“Los bosques de algas son los ecosistemas más importantes. Que tenemos en nuestro planeta. Y cuando los perdemos perdemos la biodiversidad marina. Perdemos el desarrollo socioeconómico de las zonas costeras. Todo colapsa y por eso estamos haciendo todo lo posible para ayudar a proteger y restaurar los bosques de algas”, concluye el CEO.