Circle Economy ha confirmado en el Informe sobre Economía Circular 2023 que solo el 7.2% de los materiales vírgenes extraídos de la tierra cada año se reutilizan o reciclan adecuadamente

En tanto que en 2018 dichos materiales representaban el 9.1%. Desde entonces el uso de los recursos naturales por parte de la humanidad se ha mantenido bastante estable, con 100 mil millones de toneladas al año. En tanto, se prevé un aumento a 170 mil millones de toneladas para 2050 en una trayectoria habitual.

“Estos hallazgos refuerzan que hemos llegado a un punto en el que el planeta no puede mantenerse al día con la demanda humana de bienes materiales”, dijo el director de Economía Circular y Sostenibilidad de Deloitte, Dieuwertje Ewalts.

Sobreexplotación de recursos

De acuerdo con el estudio, el impacto al cambio climático incrementa debido a las formas de sobreexplotación de los materiales vírgenes. Asimismo, una transición audaz a una economía circular podría reducir las emisiones anuales globales en 39%, con beneficios para la sociedad y la economía.

Circle economy indicó que es necesaria una reducción en la extracción de material y esfuerzos para mejorar la reutilización si se quiere alinearse al Acuerdo de París. Por lo que, la extracción de material tendrá que reducirse a cerca de 30%.

A nivel global, el informe destaca que la intensidad del consumo de recursos más alta se concentra en Estados Unidos, en algunos estados miembros de la Unión Europea y otras naciones desarrolladas en el Norte Global. También destaca la importancia de China como economía emergente, ya que ha aumentado rápidamente su consumo de materiales en los últimos años.

Eficiencia energética

El estudio señala que para mejorar la eficiencia energética es prioritario reducir la extracción de combustibles fósiles. De ahí que escalar a la energía limpia y al almacenamiento de energía mantendría los niveles de vida a medida que se lleva a cabo esto; así como también contribuiría a ello un transporte más activo, público y sostenible.

El sector de la construcción, por su parte, también tiene una alta demanda de materiales como la arena y grava. Una alternativa sería que los responsables políticos y el área inmobiliaria trabajen juntos para garantizar que, cuando sea posible, los edificios y la infraestructura se desarrollen de manera sostenible. La contratación pública y el ramo privado deben trabajar de la mano para abrir la puerta a materiales circulares bajos en carbono.

El texto destaca las afectaciones del consumo rápido y que genera mayores desperdicios de ropa, zapatos, electrónica, electricidad y juguetes.

Sector alimenticio

Respecto a los alimentos, el informe menciona que al menos el 30% de todos los alimentos producidos a nivel mundial cada año se desperdicia. Inclusive algunos estudios elevan este porcentaje hasta el 40%.

La forma de reducir los residuos es mejorar los sistemas de transporte y almacenamiento; así como promover más dietas locales y estacionales para impactar en el clima, la naturaleza y la sociedad. Otra alternativa sería interactuar con las empresas y el público en general para evitar el desperdicio de alimentos en esta parte de la cadena de valor. O bien, que el campo agrícola reduzca su uso de combustible, pesticidas y fertilizantes mediante la adopción de prácticas más conscientes del medio ambiente.

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