En Greentology nos dimos a la tarea de platicar con Cristian Bustos, ingeniero con Magíster en Medio Ambiente de la Universidad de Chile; quien nos cuenta sobre la importancia de equilibrar el desarrollo económico, el desarrollo social y la protección del medio ambiente (ESG)

Bustos es un personaje muy especial, usa lentes de armazón gris, al ser de origen chileno entona el castellano andino con dinamismo y carisma. Le agrada el empoderamiento de las mujeres, así como considera estéticos y sugerentes los diseños basados en Frida Kahlo. De igual modo le encantan los temas de medio ambiente.

De ahí que ha sido consultor internacional en medio ambiente y sostenibilidad; emprendedor en empresas de consultoría y tecnologías para la salud, el medio ambiente y la educación; y un apasionado de la innovación, las nuevas tecnologías y los rinocerontes.

Equilibrio de las partes

Cristian Bustos además es Ceo de Beeok, una suite de software para la gestión de la sostenibilidad. Considera que hemos privilegiado el desarrollo económico por sobre el desarrollo social y la protección del medio ambiente. Lo cual ha conllevado al surgimiento de movimientos ecologistas antidesarrollo en el mundo. Sin embargo, al ser ideas opuestas es necesario encontrar un equilibrio entre las tres variables ESG sin privilegiar la una sobre la otra.

“Necesitamos que las personas y las organizaciones puedan transitar hacia esta nueva forma de vivir y relacionarse”, señala.

Para ello, la tecnología juega un papel fundamental, pues ha permitido la evolución de la humanidad. En Beeok tomaron la decisión de desarrollar esa tecnología, esos software y ponerlos a disposición de las empresas, para que puedan gestionarse y acelerar los procesos de transición hacia la sostenibilidad. “Que sea más fácil, más rápido y más eficiente”.

Cumplimiento de normas una tarea tardada

Las soluciones que ofrece Beeok gestionan el cumplimiento normativo respecto al medio ambiente de México, Perú, Colombia y Chile; con la intención de implementarlas de manera interna. Esta soluciones son importantes porque ayudan a las personas y compañías a convivir por un bien común. “Todas las personas tienen que saber qué normas deben cumplir y tener herramientas para hacerlo”, comenta Cristian.

Beeok proporciona herramientas en un sistema en línea para que sepan cómo son las normas, cómo las tienen que cumplir y cuál es su vigencia a fin de asegurar su cumplimiento. Hoy por hoy, han logrado que las firmas reduzcan en 90% el tiempo que dedican a esa tarea, para que en un año mejoren en 40% su nivel de cumplimiento. Por ello, tienen clientes en el mundo de la tecnología, alimentos, construcción y minería, donde el medio ambiente y la sostenibilidad son transversales.

Lo que no se mide, no se gestiona

Para Bustos, “el problema que tenemos es que menos del 5% de las empresas de Latinoamérica ha medido su huella de carbono“.

Si se conociera este dato, se podría identificar dónde están las posibilidades de reducción y ayudarlas a resolver. Por eso, Beeok por medio de su plataforma calcula la huella de carbono y toma medidas para gestionar y reducir. Con ello, se contrapone a los medios tradicionales: llamar a un asesor, acudir a un Excel, a un Word y hacer un informe, en lapsos largos y hasta que se toma una decisión.

“Proponemos que la contabilidad de sostenibilidad tenga el mismo nivel de importancia que tiene la contability financiera. Lo comparo con las transformaciones que han tenido las industrias que en los años 80 y 90 pasaron de tener contadores de papel a las finanzas en un sistema en línea”, agrega Bustos.

El experto relata que cuentan con casi 150 clientes. Entre ellos Coca Cola, Volvo, PepsiCo y Pfizer. El 50% son empresas internacionales triple A. La otra mitad tiene importancia local en México, Perú, Colombia y Chile; de forma adicional trabajan con compañías de Ecuador y Brasil.

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Ayudar con sentido de urgencia

Para el Ceo de Beeok, “no podemos hacer una Latinoamérica sostenible sin México, por su importancia económica en el continente y por su importancia social y ambiental. Hay ecosistemas únicos en México; también hay una cultura y sociedad que necesita ser protegida y ser desarrollada“.

Bustos cuenta que el trabajo con las personas es muy gratificante, pues propicia lugares más sanos y seguros, además de ambientes libres de contaminación y cada día más sostenibles. De suerte que “si sumamos a las empresas, sus trabajadores y las comunidades que están aledañas, hay 1.7 millones de personas que se están viendo positivamente beneficiadas“.

El fan de Frida Kahlo dice que “cada día que agregamos un nuevo cliente, una nueva comunidad, una nueva ciudad, ese impacto aumenta, en consecuencia nos hace felices y nos motiva a seguir trabajando”.

Así, prospecta en dos años impactar a más de 20 millones de personas en Chile, Perú, Colombia y México, para posteriormente alcanzar los 50 millones de personas. Concluye que su desafío es acelerar la sostenibilidad en Latinoamérica; pues considera que no es responsabilidad de México solamente cuidarse, es una responsabilidad recíproca respecto a Latinoamérica.

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