El canal alemán Deutsche Welle, informó el día de hoy que los desechos del cohete chino Larga Marcha-5B ya han caído en el Pacífico Sur. China argumenta que se trata de una práctica común y que no representa algún riesgo grave para la Tierra

Los restos pertenecen al cohete de su programa especial, el Larga Marcha-5B Y4, que puso en órbita la última fase de su estación espacial. El módulo pesaba 20 toneladas y aunque la fricción contra la atmósfera lo desintegrarlo en buena parte en su vuelta a la Tierra, la basura que deja tras de es un hecho.

Es la tercera vez en dos años que China generan evento, y que en su oportunidad la NASA ha calificado de irresponsable.

Para considerar

De acuerdo con expertos en el tema, la basura espacial, los propulsores de cohetes desechados, los restos de metal y los satélites pueden permanecer en órbita años, incluso décadas.

Durante 60 años de actividad de vuelos espaciales, los más de 6 mil lanzamientos han colocado alrededor de 10 mil satélites en órbita. De éstos 6 mil permanecen en el espacio, pero solo unos 3 mil 900 operan.

La Red de Vigilancia Espacial de EU, que utiliza radares y otras tecnologías para rastrear y catalogar objetos, ha hecho saber que uno de los problemas de la basura espacial es que puede causar daños a otros vehículos o dispositivos operativos.

Los riesgos

Una colisión con un objeto de 10 cm causaría la fragmentación de un satélite típico; un objeto de 1 cm probablemente desactivará una nave espacial, mientras que un objeto de 1 mm podría destruir subsistemas en un satélite, ha informado la Agencia Espacial Europea (ESA).

El verdadero peligro de toda la basura espacial está en la velocidad con la que se mueve, esto es, a más de ¡28,000 kilómetros por hora!

En la actualidad, según la ESA, hay alrededor de 900 mil objetos con un tamaño de entre 1 y 10 cm, y unos 34.000 más grandes de 10 cm, que podrían hacer que nuevas misiones especiales corrieran riesgos.

Clasificación

De acuerdo con la ESA, son considerados desechos espaciales:

• Carga útil: satélites. Incluye los fragmentos como resultado del deterioro o de colisiones.
• Cohetes: restos de las etapas empleadas para poner misiones en órbita. Fragmentos como resultado del deterioro o de colisiones.
• Objetos relacionados con las misiones: herramientas perdidas, como tornillos, cables, cámaras, etc.

¿Esta basura supone una amenaza para la Tierra?

Los expertos señalan que no. Aunque hay una probabilidad de puede llegar a caer en la Tierra. En total, según la ESA, alrededor del 75% de los objetos ya lo han hecho.

El 75% de la superficie de la Tierra está cubierta por agua y grandes porciones de la superficie terrestre están deshabitadas. El ingreso de basura espacial de gran tamaño sería algo raro y, en caso de pasar, hay poca probabilidad de cayera en un área poblada.

Astroscale, una empresa privada que pretende deshacerse de los escombros orbitales, tiene una solución: atraparlos con un imán y quemarlos en la atmósfera.

Se sabe que en 2024, esta compañía pondrá en marcha la misión ‘ESLA-M’. En ella, probarían una tecnología para acabar con la basura espacial. Esa nave monitorizaría los satélites lanzados y pondría a prueba su capacidad de anclaje y desanclaje hacia la atmósfera terrestre, donde los satélites se quemarán al volver a entrar.

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