Piden regulaciones ante muerte masiva de abejas en Yucatán
Diferentes organizaciones denuncian la muerte masiva de abejas y polinizadores nativos, debido a fumigaciones agrícolas en la península de Yucatán; asimismo, exigen la prohibición de estas sustancias, la regulación y la modificación de las leyes que permiten estas prácticas
La comunidad científica, pobladores mayas, académicos, sociedad civil y apicultores externaron su latente preocupación por las sustancias tóxicas. Éstas son empleadas diariamente sin supervisión y control en cultivos de chile habanero, sandía, tomate y granos transgénicos.
Dañan naturaleza y legado ancestral
De acuerdo con el Colectivo de Comunidades Mayas de los Chenes, las sustancias tóxicas son vertidas al ambiente mediante aspersión mecánica y aérea ilegal. Con ello se afecta la economía, el medioambiente y la salud de las comunidades de manera incalculable.
No es la primera vez que esta situación ocurre, agregan, tal es el caso de lo sucedido en la zona de la montaña de Hopelchén, Campeche en 2012; y en la comunidad de Candelaria, Municipio de José María Morelos, Quintana Roo en 2018 y 2022.
Asimismo, indicaron ser habitantes de las comunidades y pueblos mayas de Hopelchén.
“Hombres, mujeres y jóvenes organizados, quienes desde hace más de 10 años emprendimos un proceso de defensa por la vida, la selva maya y el futuro de nuestras hijas e hijos. Somos en gran parte apicultores cuya economía e identidad depende de la actividad apícola y su polinización para nuestras milpas”.
Para la organización, el modelo agroindustrial devasta, destruye, envenena, comercia y contamina las principales fuentes de empleo; así como extermina las abejas y recursos naturales. Enfrentan el crecimiento sin control de una franja agroindustrial que atraviesa la última selva maya, “herencia de nuestros ancestros y legado para nuestros pueblos”, indican.
Catástrofe ambiental
Calificaron la muerte masiva de abejas como “una de las peores catástrofes ambientales documentadas en la historia de nuestro municipio; consecuencia del uso excesivo e irracional de sustancias altamente peligrosas utilizadas en los campos de cultivo presentes en nuestra región”.
De ahí que el colectivo insta a las autoridades para que en el marco de sus respectivas competencias, lleven a cabo de manera pronta las diligencias necesarias para investigar lo ocurrido. Además de ordenar las medidas de seguridad, correctivas y de urgente aplicación. Por ejemplo, al prohibir las fumigaciones en el municipio, para contener y evitar una mayor propagación de los contaminantes y la generación de impactos adversos acumulativos y sinérgicos.
De forma adicional, exhortan a las autoridades competentes a iniciar los procedimientos administrativos de reparación del daño y dictar las sanciones correspondientes a quien o quienes resulten responsables. Apelan a los principios pro persona, preventivo y precautorio enunciados en el artículo primero constitucional.
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