Tus emociones te pertenecen, solo tú tienes poder sobre ellas

María Pilar Sanz
Independencia emocional es tu capacidad para actuar, vivir y pensar de manera serena, independientemente de lo que sucede a tu alrededor.
La independencia emocional se mide por el tiempo que pasa desde que un hecho te perturba hasta que dejas de sentir la emoción.
“Tus emociones te pertenecen, sólo tú tienes poder sobre ellas”, es el noveno principio de cambio para convertirte en Mondaylover.
Tú me enfadas
Cuando mi hijo se enfada conmigo me dice: “Mamá, es que me enfadas, me haces recoger la habitación mientras estaba descansando y me enfadas”.
Yo le digo que no, que es él quien se enfada por algo que yo he dicho. Él no quiere reconocerlo y me cede todo el poder.
Cuando le dices a otra persona que su comportamiento te enfada, te pone triste o te da miedo, le estás dando todo el poder. Le estás diciendo: “Tú mandas en mis emociones y decides qué emoción y en qué momento aparecerá en mi vida”.
¿Crees que puedes tener independencia emocional si dejas el poder de decidir tus emociones a los que te rodean? Sobre todo, a las personas que más quieres, ¿no?
Esta conversación la he tenido muchas veces con otras personas enfadadas por el comportamiento de otros y cuesta darse cuenta, siempre argumentan: “Sí, pero él no tiene razón, su comportamiento no está justificado y me enfada”.
“Es una injusticia y me enfada”.
¿A quién cedes tu poder?
Si quieres tener independencia emocional, es importante que te des cuenta que eres tú quien se enfada por el comportamiento de la otra persona. Que es posible que en esta parte del mundo su comportamiento sea absolutamente horroroso, pero si te enfadas por ello, quien sufre eres tú.
Ese mismo hecho que hace que tú te enfades puede causar risa o pasar desapercibido a otra persona.
Hay personas muy analíticas para las que los detalles son muy importantes y un desajuste de los mismos es una crisis, y otras para las que el exceso de detalles es abrumador y no soportan que todo tenga que estar tan ordenado o tan bien colocado.
Independencia emocional
En definitiva, eres tú quien decide si algo te enfada y además eres tú quien decide que ese hecho es “digno” de tu enfado.
¿Cuánto dura una emoción?
Una emoción es un impulso a la acción, es una reacción química que sucede en nuestro cuerpo para avisarnos de algo, de un peligro, de un ataque, de una pérdida…
Y eso dura tan solo 90 segundos.
Al sentir la emoción, nuestro cuerpo inicia un proceso químico que genera unas sustancias que se disuelven en 90 segundos. Entonces, ¿por qué me paso tanto tiempo enfadada o triste? Porque sigues generando la emoción una y otra vez.
Así es como funciona, un hecho neutro provoca en ti un pensamiento (es un pensamiento condicionado por tu historia, los aprendizajes de tu infancia o quizá de una época un poco posterior). Ese pensamiento provoca en ti una emoción que dura 90 segundos, pero tú vuelves a activar el pensamiento una y otra vez, y la emoción vuelve y puede durar tanto como tú decidas mantener ese pensamiento.
¿Cómo sales del círculo vicioso? Acepta la emoción y cambia el pensamiento.
¿Por qué ese hecho te genera ese pensamiento? ¿No podría generarte otro? ¿Eso que estás pensando es una verdad absoluta?
Independencia emocional
Tus emociones te pertenecen, solo tú tienes poder sobre ellas. Por tanto deja de culpar a los demás de tus enfados, miedos y tristezas.
Si quieres tener independencia emocional, cambia el patrón de pensamiento que te provocó esa emoción que te ha atrapado. Y analiza por qué ese hecho causó en ti tal pensamiento.