Fuga masiva en Benito Juárez evidencia crisis en red hidráulica
Una fuga masiva en Ciudad de los Deportes revela fallas estructurales en la red hidráulica de CDMX; miles de litros de agua se desperdiciaron y tres colonias se quedaron sin suministro
La fuga masiva ocurrida frente a la Plaza de Toros México durante la mañana del miércoles, provocó el cierre total del Eje 6 Sur Tintoreto, así como afectaciones al suministro en al menos tres colonias y caos vial en una de las zonas con mayor tránsito de la capital.
El agua brotó con tal presión que rompió el pavimento en al menos dos carriles, provocando una pérdida de miles de litros por minuto. La emergencia, que comenzó alrededor de las 7 de la mañana, generó alarma entre vecinos y comerciantes ante el temor de afectaciones mayores. Las calles Baltimore, Atlanta y Alberto Balderas se anegaron en cuestión de minutos.
La circulación vehicular fue desviada desde el distribuidor vial San Antonio hasta Avenida Insurgentes Sur, mientras bomberos y personal técnico buscaban sin éxito las válvulas para cerrar el flujo.
La Secretaría de Gestión Integral del Agua (Segiagua) informó horas después que la fuga se originó en una línea de conducción de 12 pulgadas. Aunque fue necesario cerrar una línea principal de 20 pulgadas para permitir los trabajos de reparación. Las colonias Ciudad de los Deportes, Nochebuena y Nápoles resultaron directamente afectadas con cortes en el suministro.
¿Por qué ocurren estas fugas?
Las fugas como la registrada en Benito Juárez son consecuencia directa de una infraestructura hidráulica envejecida, expuesta a presiones excesivas, malas prácticas de instalación y falta de mantenimiento. Especialistas explican que las roturas se pueden presentar en uniones, válvulas o secciones completas de las tuberías por múltiples factores.
Entre las causas más frecuentes se encuentran la corrosión por antigüedad del material, golpes de ariete generados por cierres repentinos, asentamientos del terreno, falta de protección contra agentes externos como raíces, tráfico pesado o incluso roedores.
Además, los errores de instalación y materiales inadecuados en las uniones agravan el problema. La Ciudad de México, con una red hidráulica extensa y muchas veces obsoleta, pierde aproximadamente el 40% del agua potable debido a fugas, desperdicio y robo, según las cifras de Seguiagua.
Aprovechamiento nulo del agua de lluvia
Paradójicamente, mientras miles de litros de agua potable se pierden por fallas en la red, la ciudad también desperdicia el agua de lluvia. En ese sentido, según datos de expertos, cada tormenta genera hasta 30 millones de litros que podrían llenar tinacos de 300 mil hogares. Sin embargo, esta agua termina en el drenaje por la falta de sistemas de captación y la impermeabilización del suelo urbano, lo que impide su infiltración al subsuelo.
La combinación de fugas frecuentes, escasez de infraestructura de captación y crecimiento urbano descontrolado está profundizando la crisis hídrica. Mientras tanto, comunidades enteras en zonas como Ecatepec o Nezahualcóyotl siguen enfrentando escasez, obligadas a depender de pipas o redes externas.
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