¿Religión y sostenibilidad se pueden relacionar? Todo indica que sí. La historia de las organizaciones religiosas que luchan contra problemáticas humanas data de cientos de años; y no podían pasar por alto la sostenibilidad 

En el desarrollo de propuestas en pro del medioambiente se ha mantenido invisibilizado el papel que juegan las organizaciones religiosas; las cuales podrían ser muy importantes en la búsqueda de ciudades más equitativas y sostenibles, así lo indica el estudio del Instituto de Recursos Mundiales (WRI).

De acuerdo con la WRI, esta institución desempeña un papel clave en el apoyo a la resiliencia climática, la vivienda asequible, el saneamiento y otras transformaciones urbanas que el mundo necesita.

Por ejemplo, en la cumbre climática de la ONU de 2021 en Glasgow (COP26), 40 líderes religiosos emitieron un llamado conjunto. Ahí exigieron que se tomaran medidas urgentes para cumplir con el Acuerdo internacional de París sobre el cambio climático. Al acto se unieron un número creciente de compromisos y declaraciones ambientales de organizaciones asociadas con el catolicismo, el hinduismo, el judaísmo, el islam y otras religiones.

Más gente en las ciudades

Asimismo, la intervención de más personas frente al panorama del cambioclimático es urgente; pues en el futuro, probablemente para 2050, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), dos tercios de la población habitará en ciudades. Por lo que ello incrementará las problemáticas ya existentes, entre ellas las medioambientales.

La religión siempre ha sido una figura importante para lo que la gente valora, abraza y protege; incluida la relación de las personas con la tierra. Un ejemplo serían los rituales tradicionales de las culturas antiguas mexicanas que rinden tributo a elementos esenciales de la naturaleza, como el agua, el viento, la tierra y el fuego. Y que hoy por hoy toman relevancia en el camino hacia el respeto a la naturaleza.

Para 60,000 personas de 40 países las religiones son más confiables que las instituciones estatales, según los resultados de una consulta realizada por el Banco Mundial.

Hacen trabajo comunitario

De ahí que el análisis del WRI identifica que las organizaciones religiosas ayudan en  prioridades clave de la ciudad y apoyan a las comunidades marginadas. Como tienen una relación directa y constante con la comunidad, estas asociaciones tienen el poder y la autoridad para guiar a la población; al tiempo de que garantizan la inclusión de los grupos vulnerables.

En definitiva, después del cambio de milenio ha habido un creciente interés en el papel de las comunidades religiosas en la sostenibilidad y el desarrollo internacional. Ahora se les considera socios clave en la búsqueda de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS); así como en la lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad.

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