Rechazan expansión del Puerto El Sauzal en audiencia pública

Colectivos expresaron su inconformidad durante la presentación del proyecto del Puerto El Sauzal en el Centro Cultural Riviera

La comunidad local manifestó su rotundo rechazo al proyecto de expansión del Puerto El Sauzal. Más de un centenar de la ciudadanía, colectivos ambientalistas y organizaciones civiles se congregaron para expresar su oposición a una iniciativa que consideran opaca y dañina para el entorno natural y social del municipio.

El evento, que buscaba presentar públicamente los alcances del proyecto portuario, se convirtió en una demostración del descontento ciudadano. Los asistentes cuestionaron la falta de consulta suficiente y el proceso poco transparente que ha caracterizado el desarrollo de esta propuesta. La cual amenaza con destruir dos de las escasas playas que aún conserva El Sauzal: Tres Emes y Playa Stacks.

Durante la presentación, el almirante Luis Javier Robinson Portillo Villanueva, director de la Administración del Sistema Portuario Nacional (ASIPONA) en Ensenada, generó confusión al negar que la iniciativa hubiera sido propuesta por la oficina local de ASIPONA. Esta declaración provocó diversas reacciones entre los presentes, quienes interpretaron sus palabras como un intento de deslindarse de la responsabilidad como promovente del proyecto.

La postura del funcionario federal ha dejado en el aire una interrogante fundamental: ¿quién está realmente detrás del proyecto de expansión portuaria? La ausencia de una posición clara y unificada por parte de las autoridades responsables incrementó la incertidumbre y el malestar social en torno a esta propuesta.

Preocupaciones ciudadanas

Catorce organizaciones ciudadanas habían anticipado su oposición al proyecto mediante un documento dirigido a las autoridades federales. En ese escrito, los colectivos expresaron que “aprovechamos la presente para comunicar a usted el consenso de las agrupaciones que nos permitimos hacer llegar este escrito y que transmite el sentir de más de 13 mil familias que habitan, trabajan y conviven en El Sauzal”.

Los opositores advierten sobre la pérdida de identidad económica de Ensenada, ya que la ciudad y específicamente El Sauzal han desarrollado históricamente su vocación en torno a la pesca tradicional, el ecoturismo acuático y la gastronomía. La expansión portuaria pondría en riesgo miles de empleos locales, afectando sectores como la Ruta del Vino y las actividades pesqueras.

El impacto ambiental representa otra preocupación central. Los colectivos alertan sobre alteraciones en las corrientes marinas y el flujo de sedimentos, cambios que podrían generar nuevos patrones de erosión y amenazar la infraestructura urbana costera, incluyendo edificios, casas, hoteles y comercios. La contaminación marina, atmosférica, acústica y lumínica también figura entre los riesgos identificados.

Especies protegidas como la ballena gris, enlistada en la NOM-059, podrían verse directamente afectadas por el proyecto. Los activistas también señalan que la ampliación portuaria causaría congestión vehicular, mayor tráfico de contenedores y presión adicional sobre servicios públicos como agua potable, saneamiento y transporte.

La comunidad surfista local enfrenta una amenaza particular. El proyecto “podría generar la pérdida de espacios públicos y recreativos”, según advierten los colectivos, ya que se verían afectadas playas icónicas como Tres Emes, San Miguel y Stacks, fundamentales para el turismo deportivo y la práctica del surf.

Días antes de la presentación oficial, la Universidad Autónoma de Baja California había sido sede de un foro ciudadano donde se discutieron los impactos del proyecto. El consenso alcanzado en ese espacio académico resultó contundente, ya que la comunidad ensenadense resaltó que no quiere la expansión del Puerto El Sauzal.

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