México se suma al impulso global hacia la inteligencia artificial cuántica (IA cuántica) con un creciente número de empresas que ya invierten en esta tecnología. De acuerdo con un estudio de SAS, 61% de las compañías en el país destinan recursos a este campo emergente, que promete transformar industrias completas en los próximos años.
El reporte muestra que, aunque la familiaridad con el tema todavía es limitada, existe un interés claro de los líderes empresariales por no quedarse rezagados frente a las principales economías del mundo que avanzan en la misma dirección.
Los sectores donde se prevé un mayor impacto son la analítica avanzada, la ciberseguridad, la investigación y desarrollo (I+D) y la optimización de procesos. Estas áreas concentran los casos de uso más inmediatos y con mayor potencial de retorno de inversión.
¿Qué falta para la adopción completa de la IA cuántica en México?
Entre los principales desafíos señalados por las empresas mexicanas destacan la falta de capacitación, la accesibilidad a las plataformas y la necesidad de estandarizar la gobernanza en el uso de estas herramientas. La brecha de talento especializado sigue siendo un punto crítico para acelerar la adopción.
SAS, que desarrolla soluciones en el campo cuántico, considera que democratizar la tecnología es clave. “El objetivo es que la IA cuántica sea accesible, no solo para grandes corporaciones, sino también para startups y medianas empresas”, explicó la firma en el estudio.
El interés no se limita a la teoría. Algunas compañías mexicanas ya exploran proyectos piloto en áreas como predicciones de mercado, modelos de riesgo y simulaciones de gran escala, aprovechando la capacidad de cómputo que ofrecen estas tecnologías.
El informe destaca además que la colaboración con universidades y centros de investigación será esencial para crear un ecosistema de innovación y cerrar la brecha de habilidades técnicas.
En el plano global, países como Estados Unidos, Alemania, Canadá y China lideran las inversiones en IA cuántica. Sin embargo, México se posiciona como un actor emergente en América Latina, con un mercado ávido de innovación en sectores como energía, banca y salud.
La tendencia apunta a que, en el mediano plazo, la IA cuántica se convierta en un diferenciador competitivo. Para las empresas mexicanas, subirse a esta ola tecnológica puede representar ventajas en productividad, seguridad y sostenibilidad.
El estudio concluye que México está en una etapa inicial, pero con un potencial considerable para escalar su participación en el ecosistema global de la IA cuántica.