Tipo de búsqueda

10 países más afectados por la crisis alimentaria

G 360°

10 países más afectados por la crisis alimentaria

crisis alimentaria


El precio de los alimentos subió hasta 285% en Zimbabwe, uno de los países más afectados; seguido por Venezuela y Líbano, ante una crisis alimentaria que alerta a la comunidad internacional

En cerca del 80% de los países de ingresos bajos y más del 90% de aquellos de ingresos medios-bajos, han incrementado los costos de los alimentos en 5% en lo que va de 2023. Muchos de ellos se enfrentan a tasas de inflación mucho más elevadas, indica la Actualización sobre Seguridad Alimentaria del Banco Mundial.

El segundo país más afectado después de Zimbabwe es Venezuela, donde el alza en la inflación interanual de los precios de los alimentos fue del 158%; en Líbalo la cifra es de 143%. En cuarto lugar se encuentra Argentina, que registró el 95%. Le sigue Turquía con 77%, Ghana con 60%, Sri Lanka y Rwanda con 59%, Suriname con 55% y finalmente Haíti con 53%.

Inflación por guerra en Ucrania

Esto se debe a los precios históricamente altos de las materias primas. Tras la guerra de Rusia en Ucrania, la volatilidad de los mercados de fertilizantes, la imposición de restricciones al comercio de alimentos, entre otras causas, han dejado a muchos países enfrentados a una crisis del costo de vida con una inflación de los precios de los alimentos de dos e incluso tres dígitos, según el Banco Mundial.

En diciembre de 2022, 19 países habían impuesto prohibiciones a la exportación de alimentos y ocho habían establecido restricciones a la exportación, según el Banco Mundial. Y los países decidieron aumentar su suministro interno de alimentos para detener la inflanción; sin embargo, ante ello no lo lograron.

“El aumento de los precios de los alimentos está teniendo efectos devastadores en los más pobres y vulnerables”, dijo el presidente del Grupo del Banco Mundial, David Malpass.

¿Qué hacer?

Malpass añadió que “los países deben realizar esfuerzos concertados para aumentar el suministro de energía y fertilizantes; ayudar a los agricultores a incrementar las plantaciones y el rendimiento de las cosechas; y eliminar las políticas que bloquean las exportaciones y las importaciones, desvían los alimentos hacia los biocombustibles o fomentan el almacenamiento innecesario”.

Por su parte, el Banco Mundial coincide en que es una prioridad adoptar medidas para apoyar a los agricultores y su producción para enfrentar esta crisis alimentaria. Por ejemplo, eliminar las barreras al comercio de insumos, usar fertilizantes más eficientes y reconfigurar las políticas y los recursos gubernamentales para elevar la producción del próximo año.

Otra acción necesaria es alcanzar un consenso internacional entre el G7, el G20 y otros grupos para reducir las barreras al comercio mundial. Esto significa contrarrestar medidas proteccionistas como las restricciones nacionales a la exportación, que hacen subir los precios de los alimentos; y las restricciones a la importación, que frenan la producción en el mundo en desarrollo.

Además de ampliar programas de protección social sensibles a la nutrición; crear mecanismos de financiamiento y respuesta temprana a emergencias; así como invertir para que los sistemas alimentarios, cada vez más frágiles, sean más resilientes a las interrupciones del comercio, las crisis económicas y las perturbaciones derivadas de los conflictos, el cambio climático, las enfermedades y las plagas.

TE PUEDE INTERESAR ♦ 30% de los alimentos a nivel mundial se desperdician por mala logística

Tags:

También te puede interesar