La prueba piloto se llevará a cabo en la Alcaldía Cuauhtémoc. De esta manera, se podría garantizar el correcto funcionamiento funcionamiento de las redes de agua potable, drenaje y agua tratada en el menor tiempo posible después de eventos sísmicos, según SACMEX.

Durante la reunión de trabajo también se abordaron los avances que se han tenido en el convenio de cooperación entre Nagoya y la Ciudad de México, de gran relevancia para ambas instituciones encargadas de la gestión hídrica. Ya que a partir del mismo se han producido documentos importantes como los Manuales de Actuación en Caso de Sismo para las instalaciones de agua potable, drenaje y tratamiento y reúso del SACMEX, elaborados también en coordinación con la SGIRPC.

La clave, el hierro dúctil

Asimismo, el desarrollo del Proyecto de Obra para la Ciudad de México con Tubería de Hierro Dúctil, material utilizado en Nagoya para el manejo de agua residual tratada, que posee características de conexión que permiten continuar con el abastecimiento de agua potable en caso de un sismo.

Gracias a este convenio de cooperación basado en el intercambio de conocimiento técnico, en la jornada de este martes se establecieron las directrices generales, los requerimientos mínimos para una línea de mando y canales de comunicación adecuados, con apoyo en la información y el uso de tecnologías sismo-resistentes.

De esta forma se dará continuidad a la operación del SACMEX y garantizará que los servicios de agua potable, drenaje y agua tratada llegue a toda la población de la Ciudad de México en situaciones de riesgo sísmico.